SEMANA SANTA: VIERNES SANTO, SANTA MISA DESDE EL TEMPLO SANTA ROSA DE VITERBO.

El Viernes Santo acompañemos a Jesús en su camino al calvario, uniéndolos en la celebración de la Santa Misa, desde el Templo e Santa Rosa de Viterbo, a las 7:00 p.m por la plataforma digital de SM de la Paz, presidida por P. Martín Lara Becerril. 

También te sugerimos rezar en familia el Vía Crucis, y recuerda que es día de Ayuno y Abstinencia, hacer una comunión espiritual y coloca una cruz en tu puerta, una forma diferente de celebrar este día en la iglesia domestica. 

Vía Crucis (en latín: El camino de la cruz)

Ejercicio piadoso que consiste en meditar el camino de la cruz por medio de lecturas bíblicas y oraciones. Esta meditación se divide en 14 o 15 momentos o estaciones. San Leopoldo de Porto Mauricio dio origen a esta devoción en el siglo XIV en el Coliseo de Roma, pensando en los cristianos que se veían imposibilitados de peregrinar a Tierra Santa para visitar los santos lugares de la pasión y muerte de Jesucristo. Tiene un carácter penitencial y suele rezarse los días viernes, sobre todo en Cuaresma. En muchos templos están expuestos cuadros o bajorrelieves con ilustraciones que ayudan a los fieles a realizar este ejercicio.

Abstinencia (del latín abstinentia, acción de privarse o abstenerse de algo)

Gesto penitencial. Actualmente se pide que los fieles con uso de razón y que no tengan algún impedimento se abstengan de comer carne, realicen algún tipo de privación voluntaria o hagan una obra caritativa los días viernes, que son llamados días penitenciales.
Sólo el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo son días de ayuno y abstinencia.

Ayuno (del latín ieiunium, ayuno, abstinencia)

Privación voluntaria de comida por motivos religiosos. Es una forma de vigilia, un signo que ayuda a tomar conciencia (ej.: el ayuno del Miércoles de Ceniza recuerda el inicio del tiempo penitencial) o que prepara (ej.: el ayuno eucarístico predispone a la recepción que en breve se hará del Cuerpo de Cristo).

La Iglesia lo prescribe por el espacio de un día para el Miércoles de Ceniza, con carácter penitencial, y para el Viernes Santo, extensivo al Sábado Santo, con carácter pascual; y por una hora para quienes van a comulgar.