MISA DE EXEQUIAS DEL PBRO. MARIO SÁNCHEZ GUZMÁN.

Pedro Escobedo, Qro. el 10 de septiembre de 2022.

Mons. Fidencio López Plaza, X Obispo de Querétaro, Presidió la misa de Exequias del Pbro. Mario Sánchez Guzmán, en la Parroquia Santa María de Guadalupe, Pedro Escobedo, Qro. el 10 de septiembre de 2022.

En el momento de la Homilía el Pbro. Silvestre García Suarez compartió diciendo: “Nos reunimos en este lugar donde el padre Mario ha pasado sus últimos años, nos reunimos con tristeza ciertamente, pero al mismo tiempo nos reunimos con alegría, nos duele su partida pero nos alegra su llegada, porque estamos seguros que ha llegado con Jesucristo.

Escuchamos la parábola de los talentos, “ven, siervo bueno y fiel ven, a tomar parte de tu herencia”, el padre Mario ha sido un sirvo bueno y fiel, que ha entrado en la alegría de su señor y el cual nos debe dar fortaleza.

El testimonio que hoy podemos dar nosotros es, que a esto que nos invita la palabra, y que su palabra ha sido real, su fidelidad que ha dado y su testimonio, en el trabajo pastoral es mas que evidente, porque siempre se supo entregar en cada una de sus parroquias.

El señor le entrego un día muchos talentos y que podemos dar testimonio, de que siempre anduvo buscando mucha creatividad para que esos talentos se multiplicaran, y estamos seguros de que el ha sido un sirvo bueno y fiel; entra a formar parte de la patria prometida. Descanse en paz.

Antes de finalizar, Mons. Fidencio dijo: “Que el Dios de las sorpresas nos ha vuelto a sorprender, pero al padre Mario lo encontró con su lampara encendida, tuve la fortuna de estar en este transito final y lo vi en paz.

Durante su recorrido por la Diócesis, lo venos siguiendo los pasos de Jesús buen pastor, y es chamos su mensaje siempre alegre y valiente, que esto siga irradiando en esta parroquia.

Y También pidió la Pbro. Arturo Méndez, toma la Administración de la parroquia en lo que se nombra al nuevo párroco.  

Posteriormente se hizo la oración para dar sepultura al cuerpo del Pbro. Mario, por Mons. Fidencio, aspergió agua bendita e incienso el féretro, para concluir dando la bendición final.