Curso de Renovación Teológica del Presbiterio

IMG_99731

(CODIPACSQRO) Del 17 al 21 de junio se realizó en el Seminario Conciliar, para la formación permanente del presbiterio de la Diócesis de Querétaro, el Curso de Renovación Teológica con el título “La Dimensión Social de la Fe”. El objetivo fue descubrir los signos de los tiempos que presenta la realidad social de nuestra Iglesia Diocesana para impregnarla de los valores del Evangelio, llenos de fe en Jesucristo enviado del Padre y Señor de la historia a través de la Misión Permanente.

La metodología permitió VER: como la actividad caritativa de la Iglesia debe evitar el riesgo de diluirse en una organización asistencial genérica. Buscando una visión de la realidad de la Iglesia hoy, desde un punto de vista laical y ministerial.

JUZGAR: estudiando y reflexionando sobre la naturaleza diaconal de la Iglesia y del ministerio episcopal, profundizando en la actividad caritativa en los santos padres, en la edad media y en la época moderna. El significado de la pobreza y de la opción por los pobres. Destacable fue ver y comentar un video del entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio a la organización de Cáritas de Argentina, en él se pueden apreciar algunos rasgos sobre la actividad caritativa en el pensamiento del Papa Francisco.

ACTUAR: La Iglesia está llamada a ejercer la diakonia de la caridad en su dimensión comunitaria. Los sacerdotes de la Diócesis seculares y regulares reflexionaron sobre el Motu proprio “El servicio de la caridad”. Consideraron algunas acciones concretas de caridad que se realizan en la Diócesis, se tuvo un recuento de Cáritas diocesana y parroquial y se dedicó un tiempo importante al desafío de la pastoral de migrantes.

Al finalizar la celebración de la Eucaristía, siempre se invita a la asamblea a ir en paz y a vivir en su vida ordinaria el gran regalo de la caridad, el mandamiento explícito de Jesucristo de ver en los hermanos necesitados su misma persona.

En la Diócesis de Querétaro existen infinidad de iniciativas encaminadas a ver por los niños, los ancianos, los enfer-mos, los drogadictos, los alcohólicos, los deficientes mentales, los abandonados, menores en riesgo, todas ellas sin costo y sin interés económico por mínimo que sea. Todas ven por la promoción humana y la evangelización, todas ellas iniciativas de grupos y comunidades de laicos y consagrados que viven la misma fe y unidos a la Iglesia, hacen vida su fe. Iniciativas abiertas y al servicio alegre de quien da sin esperar nada.

En este año enfatizamos de manera especial la Pastoral Social en la Iglesia local y siempre recordemos como invita el documento de Aparecida: “descubramos la oportunidad de servir a Dios en los hermanos dolientes de nuestra Iglesia, los que siempre serán menos favorecidos”.