70 ANIVERSARIO DE LA CORONACIÓN DE NTRA. SRA. DE GUADALUPE. LA GRIEGA

La Griega, El Marqués, Qro., 01 de enero de 2020.

 

El miércoles 1 de enero de 2020, la comunidad de la Griega, ubicada en el municipio de El Marqués y perteneciente a la parroquia de San Alfonso María de Ligorio, celebró el 70 aniversario de la coronación de la venerable imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, en el marco de la Solemnidad de “María Madre de Dios”. A las 12:00 del mediodía, el Pbro. Alejandro Gutiérrez Buenrostro, Rector del seminario Conciliar de Querétaro, celebro la Sagrada Eucaristía y fue concelebrada por el Párroco Martín Felipe Reséndiz y el Pbro. Nabor Fonseca, durante la celebración el Pbro. Alejandro, en representación de Mons. Mario de Gasperin Gasperin, administrador diocesano de la Diócesis de Querétaro, administro el Sacramento de la Confirmación a un grupo de 120 niños y niñas, en la cual afirmo a los feligreses que al recibir el Espíritu Santo, Él nos da fuerza en las debilidades, nos ilumina ante la duda, nos consuela en momentos de dolor, nos ilumina cuando hay que decidir y es nuestro compañero cuando nos sentimos solos, al finalizar este momento, el Pbro. Alejandro corono a la venerable imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, recordando el momento en que hace 70 años fue coronada por primera vez.

El su homilía, el Pbro. Alejandro compartió: “Saludo, a nombre de Monseñor Mario, nuestro señor obispo y administrador diocesano, al Señor Cura y padres aquí presentes, y a toda la comunidad.

Hoy nos reunimos aquí para celebrar los misterios de la vida, por un lado estamos iniciando un nuevo año civil y se ha quedado atrás tantas experiencias de vida, al mismo tiempo nos reunimos como Iglesia, en general, para celebrar a María como Madre de Dios, y también esta comunidad se reúnen de manera muy particular para agradecer setenta años del patrocinio, del acompañamiento, de la coronación de la Santísima Virgen María en su advocación de Guadalupe; queridos hermanos cuántas veces nosotros hacemos un regalo alguien que es especial para nosotros, recuerdo cuando estaba en la primaria en torno al 10 de mayo pues nos ponían a hacer un regalo para nuestra mama, no era comprarle algo, era hacerle algo y durante días preparábamos este pequeño obsequio para nuestra madre, y lo que es cierto es que cuando uno se lo daba nuestra mamá se pone muy contenta, a veces estaba muy feos los trabajos o los regalos para la mamá, pero ella no veía la fealdad del trabajo, del regalo, sino la intención y la dedicación nuestra puesta en ese regalo de parte del hijo, pues así como nosotros le hemos dado regalos a nuestra mamá Jesús también le da regalos a su mamá, el regalo que la Santísima Virgen María recibe es esté, permanecer llena de gracia, no ser tocada por el pecado, sino permanecer en la gracia de Dios; aquí quiero hacer la diferencia de qué, por un lado, Dios pone su mirada en ella y la guarda del pecado, pero también, cuando María es consciente, ella decide vivir en la gracia de Dios, y esto es muy hermoso, por un lado Dios que pone su mirada en María, pero por el otro lado María que le responde a Dios, pidiendo y cuidando esa gracia que Dios le ha dado, de ahí que es importante que nosotros también aprendamos a responder a las gracias que Dios nos va dando, nos encontramos aquí también porque, como hemos escuchado en el Evangelio, como María guardaba todo eso en su corazón, cuando llegaron los pastores y les dicen a ella y a José lo que el Ángel les dijo sobre aquel niño, y nos dice el Evangelio “y María guardaba todo esto en su corazón”, hermanos la pregunta es: ¿y qué hay en nuestro corazón? tenemos la oportunidad de ir viviendo, la vida es una, el tiempo va pasando, pero junto con el tiempo que va pasando tenemos que aprender a vivir y a disfrutar la vida y lo que es cierto es que a lo largo de nuestra vida Dios nos va acompañando, Dios se va haciendo presente, pero ¿cuántas veces Dios pasa en nuestra vida y lo guardamos en nuestro corazón? ¿guardamos estas vivencias de Dios en nuestro corazón o se nos olvidan? cuántas veces el ruido, las preocupaciones, el sufrimiento, la indiferencia, la mediocridad, el culto, el sincretismo religioso, o incluso, aquellos que a veces andan por ahí con la niña blanca, con la muerte, eso es lo que aguardan de su corazón, eso está mal, ¿por qué? porque Dios va caminando con nosotros, pero es importante que, así como María recibe el mensaje de Dios, aprendamos a guardarlos en nosotros, esos mensajes de Dios de alguna manera nuestra parroquia se mantiene activa, está en evangelización continua, es un paso de Dios, la evangelización es un paso de Dios y lo escuchamos en María, la misión permanente es un paso de Dios en la vida de nuestra comunidad, la escuchamos, la recibimos y la hacemos nuestra, se están viendo frutos en nuestra familia y en nuestro corazón con esta misión permanente, se están viendo frutos en nuestra comunidad, porque Dios está pasando, los sacramentos y su palabra también son pasos de Dios y también Dios pasa en la vida ordinaria, pero necesitamos estar atentos al paso de Dios en nuestra vida, para que cuando pase tomemos la actitud de María, que no pase, que se quede, hay que guardar esas experiencias en nuestro corazón, es esto lo que nos va a permitir, queridos hermanos qué nuestra vida de verdad experimentamos la presencia de Dios y qué no se vaya quedando en nuestro corazón la indiferencia, el rencor, el odio, la división, la falta de fe, Dios camina junto a nosotros y Dios pasa junto a nosotros y desea quedarse, entonces ¿cuál tiene que ser la actitud de acuerdo al Evangelio que acabamos de escuchar hoy? cuando Dios pase, cuando Dios nos hable, cuando Dios camine junto a nosotros, esas experiencias son las que debemos guardar en el corazón, y así estaremos viviendo con el Dios de la vida, Dios es un Dios de vivos, Dios es un Dios que vino a promover vida y vida eterna, entonces yo quiero invitarles a que vayamos alejando de nosotros eso sincretismos religiosos, esos que andan adorando a la muerte está muy mal, con la boca le pueden estar diciendo a Dios “sí soy tu hijo”, pero con su manera de vivir y con estas costumbres que está en favor de la muerte le están diciendo a Dios “no soy tu hijo”, con la boca te digo que sí, pero con mis obras te digo que no, entonces tiene que haber coherencia, si nosotros creemos en el Dios de la vida tiene que haber coherencia entre nuestras palabras y nuestra manera de vivir.

Y tercer punto, nos encontramos aquí también porque algunos miembros de nuestra comunidad van a ser confirmados, fíjense que la confirmación también se le conoce como el segundo bautismo o la respuesta al bautismo; en el bautismo Dios nos llama a ser sus hijos por iniciativa de Él, por amor de Él, nos llama a ser sus hijos, y la confirmación, por eso es que ya hay conciencia en estos jovencitos y en estos niños, es “yo quiero confirmar el deseo de vivir como hijo de Dios” entonces en el bautismo Dios me llamas ser su hijo y en la confirmación yo le respondo que deseo vivir como hijo de Dios y eso es lo que va a pasar con ustedes niños y jóvenes, hoy ustedes vienen a decirle a Dios: “quiero vivir como tu hijo” es eso “quiero vivir como tu hijo” y cuando nosotros queremos vivir como hijos de Dios, Él no nos deja solos siempre nos da fuerzas, por eso en la confirmación de una manera muy especial ustedes recibirán al Espíritu Santo y qué es lo que hace el Espíritu Santo en la vida de los hijos de Dios, pues el Espíritu Santo nos fortifica en momentos de debilidad, el Espíritu Santo nos ilumina en momentos de duda, el Espíritu Santo nos consuela en momentos de dolor, el Espíritu Santo nos ilumina cuando hay que decidir, el Espíritu Santo se convierte en nuestro compañero cuando nos sentimos solos, el Espíritu Santo se convierte en esa luz en medio de la oscuridad, eso es lo que hace el Espíritu Santo en la vida de los hijos de Dios, lamentablemente muchas veces no somos conscientes de que el Espíritu vive en nosotros y que nos da estas gracias, de allí que niños, jóvenes y adolescentes, que hoy van a ser confirmados yo los quiero invitar a que sean conscientes de que el Espíritu vive en ustedes y que ahorita va a descender sobre ustedes y que ese Espíritu Santo es el que les va a permitir tener este acceso de una manera más grata a la gracia de Dios, al Dios que está pasando junto a nosotros, en nuestra vida y descubrirlo así como lo hizo María; vamos a pedir por eso, la fuerza del Espíritu Santo, para que nos vivifique, vamos a pedir la fuerza del Espíritu Santo, para que la misión permanente siga adelante, vamos a pedir la fuerza del Espíritu Santo para que cuidemos la unidad en nuestra comunidad y en nuestras familias y pidamos también la fuerza del Espíritu Santo para que seamos promotores de la paz, hoy que estamos celebrando la Jornada Mundial de oración por la paz, oremos por la paz interior, por la paz en nuestras familias, por la paz en nuestra comunidad, pedimos la intercesión de la Santísima Virgen María en su advocación de Guadalupe o que nos reunimos para celebrar estos 70 años de su coronación».

Al terminar la celebración el Padre Alejandro les dio la bendición y felicito a los confirmados, a sus papas y padrinos; el Pbro. Martín Reséndiz, Párroco de esta comunidad, agradeció el Pbro. Alejandro por haber asistido a esta celebración en representación de Mons. Mario de Gasperin Gasperin, administrador diocesano de la Diócesis de Querétaro.