CONFIRMACIONES, PARR. JESÚS DE NAZARET, COL. CIMATARIO.

 Colinas del Cimatario, Querétaro, Qro. 12 de Agosto de 2017.

El día 12 de agosto de 2017, Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de la Diócesis de Querétaro, Qro. Presidio la Sagrada Eucaristía, en la que 20 jóvenes y niños recibieron el Sacramento de la Confirmación,  en la Parroquia de Jesús de  Nazaret, ubicada en Cerro del Peñón # 13 Colinas del Cimatario, Querétaro, Qro., los jóvenes y niños fueron preparados debidamente para recibir tan grande regalo con el cual se da en plenitud el Don del Espíritu Santo.

Al inicio se hizo una Monición que decía: “El Sacramento de Confirmación, es uno de los sacramentos de la iniciación cristiana, el Obispo como representante de Cristo en la Diócesis, preside esta Asamblea en la cual el Espíritu Santo que ya habita en el corazón de los bautizados, se les infundirá con mayor plenitud, a fin de hacerlos madurar y crecer  como Cristianos,  renovemos nuestra fe en la presencia del Espíritu del Señor, en medio de la asamblea y  dispongámonos a recibir a los que se han de confirmarse, como los que ya estamos en  una nueva efusión del Espíritu Santo”. Y  Mons. Faustino les compartió en su homilía:

“De antemano felicidades,  a quienes se han preparado convenientemente de acuerdo a su edad para vivir esta experiencia del Sacramento de la Confirmación,  sin duda es un día especial, para la familia, sin duda para quien hoy lo reciben conscientes del gran regalo que Dios les da, el Espíritu Santo qué tanto se necesita en las familias, que tanto se necesita en nuestra sociedad,  para dejarse transformar por este don, que es luz de Dios, que es fuerza de Dios, por eso  esta ceremonia de la confirmación, es tan importante, porque a determinada edad, con la preparación conveniente el corazón de quien recibe a Dios se abre.

Fuimos  bautizados, es cierto,  y en el Bautismo recibimos el Espíritu Santo pero en la Confirmación, como la palabra lo dice se confirma el don con más plenitud, damos gracias a Dios porque sus papás sus padrinos les acompañan de tal manera que lo hacen  porque tienen fe; y la fe también es un regalo como dice el Evangelio un regalo que provoca los milagros,  cuando se debilita la fe, suceden muchas cosas en la personas, en las familias, cuando se debilita la fe no hay entusiasmo por las cosas de Dios.

Afortunadamente en nuestra Diócesis de Querétaro tenemos un gran remanente de fe, una gran dosis de fe, y ustedes lo pueden ver,  seguramente ustedes son partícipes de muchas de las manifestaciones de piedad popular, y es parte de quien cree, y la fe no solamente es para los casos desesperados, cuando estamos en alguna angustia entonces si recorremos a Dios, la fe es  un don para todos los días,  por eso en un día más de la vida se recibe también los sacramentos que fortalecen en la fe y que son signos de que creo  y que creo en Dios, y que Dios  puede  hacer algo o mucho en mi vida.

Hermanos los milagros son posibles, que siempre se den, porque los milagros los hace Dios, hoy en el Evangelio se acerca una persona con un joven a los discípulos de Jesús y resulta que aquel joven tiene un espíritu maligno que hasta lo echan al el fuego y lo hace caerse, y aquellos  seguidores de Jesús no pueden con aquel espíritu y recurren a Jesús, que  bueno es que recurramos a Jesús que es quien lo  puede todo,  pero solamente recurre a Jesús aquel que tiene fe,  el incrédulo lógicamente no es posible que se realicen milagros en su vida, sin embargo a pesar de la recriminación de Jesús, el señor sigue actuando y sana a aquel joven.

Pero nos invita a todos hoy en el Evangelio, a crecer en la fe,  primero a tenerla tan  pequeña como el grano de mostaza, si la tenemos así dice Jesús puede mover montes, es decir puedes hacer cosas que el hombre por sí mismo por sus méritos y por su fuerza y  recursos no puede hacer,  con la ayuda de Dios se puede todo, no se necesita tener grandes recursos, no se necesita ser un personaje de sociedad para que Dios actúe, no,  Dios actúa en los corazones sencillos y hoy quiere actuar en nosotros basta que  abramos  nuestro corazón al poder transformador de Jesús. Hoy les invito a quienes van a ser confirmados,  a quienes los acompañan sus padrinos,  sus madrinas a que se abran a Jesús y seguramente muchos milagros hará Dios en tu vida,  sobre todo el gran milagro de transformar tu corazón, para que con tu rostro, con tu conducta, con tus actitudes puedas ayudar a transformar el corazón de otros humanos.

Que el Espíritu Santo que hoy invocamos y a esa invocación decimos amén,  sea para nosotros la fuerza de Dios que nos siga acompañando, sea la luz que esté iluminando nuestro camino y que la Santísima Virgen María sigue siendo un faro de luz,  que oriente nuestra vida porque somos un pueblo que ama a María oriente nuestra vida por los caminos de la voluntad de su hijo Jesucristo especialmente los caminos de esta Parroquia dedicada a Jesús de Nazaret. Que Así sea”.

Al final agradecieron  al señor Obispo, dándole un fuerte aplauso y agradecieron también a los que participaron en las catequesis para que sigan fortaleciendo la fe en esa comunidad parroquial.