CELEBRACIÓN EUCARÍSTICA EN LA ASAMBLEA DEL DECANATO DE SANTIAGO. 

Querétaro, Qro., 09 de febrero de 2023.
El 09 de Febrero de 20223, se llevó a cabo la 2da. Asamblea Decanal de Pastoral, que en esta ocasión correspondió al Decanato de Santiago, teniendo como sede la Parroquia  de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en donde se reunieron los sacerdotes, acompañados de sus Consejos de Pastoral, con el fin de presentar sus evaluaciones 2022, así como sus programaciones 2024. 
La Santa Misa, con la que se concluyó fue presidida por  Mons. Fidencio López Plaza, X Obispo de la Diócesis de Querétaro, y concelebrada por Pbro. Rogelio Olvera Vargas, Vicario General de Pastoral, Mons. Martín Lara Becerril, Mons. Sacramento Arias Montoya, Pbro. Lic. Saúl Ragoitia Vega, así como los sacerdotes que conforman este decanato. 
En la Homilía Mons. Fidencio compartió diciendo: «El Evangelio nos presenta aun enfermo sordo y tartamudo donde Jesús nos hace toda una demostración de como hacer oír y hablar a todos los sordos y tartamudos de todos los tiempos. 
La técnica es muy sencilla un lenguaje no verbal y solo una palabra.
primero lo aparto de la multitud, luego le toco los oídos, y luego miro al cielo y suspiro todos estos signos con un profundo significado para hacer entender a sus discípulos, la necesidad el contacto personal y del lenguaje no verbal.  y una sola palabra «Ábrete». 
Esto es lo que Jesús nos pide apliquemos también nosotros, nos invita a revisar ¿Cómo anda nuestra visión, nuestra audición y nuestra elocución?.
Estemos atentos, a las acciones de demonio principal contrario de Dios, porque el no quiere que los hijos de Dios no vean, no escuchen, ni hablen de la buena noticia del reino, no quiere que los discípulos e Dios se den cuenta que son hijos de Dios, ni que hablen a los demás,  de la dicha y la belleza de ser hijos e dios y de sentirse en el hueco de sus manos. Que Dios así nos lo conceda. 
Seas amada, seas alabada, seas invocada, seas eternamente bendita. ¡Virgen del Perpetuo Socorro!, mi esperanza, mi amor, mi Madre, mi refugio y mi vida. Amén.