01 DE NOVIEMBRE SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS.

𝐒𝐨𝐥𝐞𝐦𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐥𝐨𝐬 𝐬𝐚𝐧𝐭𝐨𝐬, 𝟎𝟏 𝐝𝐞 𝐧𝐨𝐯𝐢𝐞𝐦𝐛𝐫𝐞.
El próximo lunes celebraremos la solemnidad de todos los santos, en la que conmemoraremos a todos los que han recibido del Señor la corona de justicia, sean o no conocidos.
La Iglesia, como parte de su misión de enseñar, santificar y gobernar, propone a mujeres y hombres que sobresalen por la forma en que vivieron las virtudes evangélicas para que sean venerados e invocados, declarándolos santas y santos en un acto solemne.
Al canonizarlos e inscribirlos en los libros litúrgicos, añaden al nombre del santo un “titulo”, que permite identificarlos e individualizar su camino a la santidad.
Desde antiguo, a los que habían derramado su sangre por el Señor se les reconoció como “mártires”. Aunque salvo san Juan todos los apóstoles y evangelistas fueron martirizados, se hizo la distinción de ellos con estos dos títulos. A éstos se le añadió el relativo al grado del sacramento del Orden que hacían recibido (“obispo”, “presbítero” o “diácono”), y la referencia a si habían sido papas.
También se añadió como el título la cualidad que los identificara a partir del estado de vida: “abad”, “virgen”, “monje” y “religioso”; así como los relativos a su naturaleza (arcángel), o a la declaración que se ha hecho de ellos como eminentes maestros de la fe (doctor de la Iglesia).
Cuando el santo no posee algunas de esas características, se escribe su nombre a secas, sin título a su lado (santa Mónica, por ejemplo).
Hay que decir que pueden unirse los títulos en caso de que el santo se encuentre en varias categorías (obispo y doctor de la Iglesia; obispo y mártir; apóstol y evangelista; virgen y mártir, etc.).
Otro título es el de “profeta”. Aunque en el calendario romano general no se hay santos con ese título, sí los hay en algunos calendarios particulares, como a san Elías, en el calendario carmelita. Tampoco en el calendario general hay santos con el título de “patriarca”, aunque anteriormente se le daba a Abraham, Isaac y Jacob. Asimismo, también existían otros títulos, como el de “viuda”, o el de “confesor”, referido a los que dieron testimonio de Cristo soportando adversidades, pero sin llegar a derramar su sangre.
📸 Pinterest