FIESTA PATRONAL Y CONFIRMACIONES, PARR. SANTA MARÍA DE GUADALUPE, PEDRO ESCOBEDO.

Col. Centro, Pedro Escobedo, Qro. 12 de Diciembre de 2016.

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La comunidad parroquial de Santa María de Guadalupe, el día 12 de Diciembre de 2016, recibió la visita de Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, quien presidió la Sagrada Eucaristía con  motivo de la Fiesta Patronal en Honor a la Santísima Virgen de Guadalupe; dentro de la celebración, instituyo  a 6 Ministros Extraordinarios de la Comunión (MEC) Y  Confirmo en la fe a 200 niños, quienes acompañados de sus padrinos y familiares y después de haber recibido una a adecuada catequesis  pre sacramental,  bien dispuestos, fueron presentados a Mons. Faustino, por el Sr. Cura, Pbro. Mario Sánchez Guzmán, para que les impusiera las manos y hacerles  partícipes de la gracia. Al inicio de la celebración, Mons. Faustino, expresó:

“ Hermanos, hoy México  en todos los santuarios de Nuestra Señora de Guadalupe, y este momento escogido por intercesión  motivado por el profundo amor a María, por el profundo amor a Dios, que María nos siga llevando a Jesús; pidamos hoy por México , por la Paz en nuestro país principalmente, pidámosle muy especialmente por intercesión de María a Dios, que nos libere de aquello que va contra la dignidad de las personas , que nos libere de la corrupción , pero especialmente  que libere a México de todo aquello que no es de Dios.

En las manos de  María, ponemos  a esta comunidad y a nuestra Diócesis de Querétaro; iniciemos nuestra Celebración, pidiendo a Dios por todas nuestras familias y por todos los enfermos”.

A continuación,  presentamos el texto completo de la Homilía de Mons. Faustino:

“Les  saludo con especial afecto y con la alegría de encontrarnos en esta  celebración tan significativa para la parroquia;  en la cual celebramos  a Santa María de Guadalupe, patrona de esta comunidad. Saludo al Pbro. Mario, al Pbro. Arturo, a los agentes de Pastoral , a los y las catequistas , que prepararon a estos niños y jóvenes, con generosidad para que en este día ellos pidieran; con un conocimiento más profundo de la doctrina sobre la  Confirmación, pudieran recibir el gran regalo del Espíritu Santo.

Hoy es un día muy importante para ustedes, en el que Dios les da este regalo, es el mismo regalo que vino al seno de la Santísima Virgen María, cuando el Ángel de parte del Señor le anuncio que iba a ser la madre de Dios;  y por eso el Espíritu Santo es el que trae  nuestra alegría; denle gracias a Dios, nos unimos a esta gratitud con todos los papás y todos los miembros de esta comunidad, también celebran esta fiesta.

Al contemplar esta hermosa imagen,  un mosaico de Nuestra Señora de Guadalupe, sin duda sentimos su mirada, la mirada de una madre,   que se dignó bajar por nosotros, si nosotros nos dejamos ver por María sentiremos el consuelo que necesitamos; y aquí  quiso pintarla Dios, en el ayate de san Juan Diego, en esa imagen milagrosa y así, nos ha acompañado a lo largo de 485 años , a los mexicanos , con ternura y a lo largo de todo este tiempo todos sin excepción , hemos recibido su bendición y consuelo su socorro  por eso la veneramos de manera especial y por eso venimos a hablar con ella y a darle las gracias.

El Papa, cuando miro esta hermosa, imagen dijo “No hizo nada igual con ninguna otra nación”   -refiriéndose a México- y creo que esto nos debe de llenar de grande orgullo pero también  hacer que  en nuestro corazón allá un lugar para Dios, no basta ser guadalupano, necesitamos ser y vivir como hijos de Dios, es decir,  que Dios y la virgen se sientan orgullosos de nosotros, Porque la presencia de María,  hace eso en nosotros.

Hoy hemos escuchado en el pasaje del evangelio cuando María, esperando al niño Jesús en su vientre va a visitar a su prima  Isabel, estaba esperando también un bebe en su vejes; y cuando llega María, -dice el texto- “El niño salta de gozo,  en el seno de Isabel”;  esto significa que la presencia de María tiene que  llevarnos  a sentir algo diferente algo nuevo, algo que le dé sentido a tu vida; y seguramente aquel hogar se llenó de alegría , de seguridad.

Hoy les invito a dejarnos visitar por la Santísima Virgen María, que viene como misionera de Dios Padre, que viene a encontrarnos a nosotros, que se ha tomado la atención de bajar del cielo  para quedarse con nosotros; démosle gracias a Dios por este acontecimiento guadalupano, un acontecimiento de fe, que a lo largo de la historia, y hoy en nuestro tiempo sigue estando  tan latente como el día de las apariciones.

 Y en segundo lugar esta hermosa experiencia de encontrarnos con María,  nos debe de llevar a ser mejores, el compromiso de corresponderle como hijos de Dios, ya decíamos  que la mejor manera de venerarla es portándonos como hijos de Dios  de tal manera que ella siempre que tiene que ayudarnos nos dice” Hagan lo que él les diga” lo que les dijo Jesús nos dice “Hagan su voluntad” y no  la de ustedes.

Y ella no solo nos dice sino que nos pone el ejemplo, no fue  fácil  seguramente aquel momento de incertidumbre  que ella no comprendía el formidable anuncio del Ángel cuando le dice  la propuesta de ser la madre de Dios, y ella se turbo, sin embargo respondió  “Hágase como dices, hágase según tu palabra” “hágase como el  Señor quiere” y fruto de este ¡Sí! su vida es  de entrega total.

 Hermanos e invito a que como maría le digamos ¡Sí! Al Señor, a su Palabra, pero nuestro compromiso tiene que ser,  todavía más fuerte; Abrir a Biblia en Familia para escuchar lo que Dios nos dice; tenemos que leer más la Palabra de Dios, hay que conocer más que nos dice esa Palabra,  que significa. Por eso, cada vez más en nuestras parroquias queremos abrir esos espacios de formación sobre la Palabra de Dios, y que se multipliquen los círculos bíblicos en nuestra comunidad.

Que no necesariamente tengan que venir al templo, sino haya en sus comunidades ahí en su hogar, la Biblia tiene poder para transformar corazones porque es la Palabra de Dios, porque no es un libro lo que tenemos en la mano es una persona que está plasmada en Palabra de Divina.

 Pero también un compromiso creo que podemos refrendare nuestro amor en familia a la Santísima Virgen María, que hermoso es mirar a las familias unidas y unidas por el Santo Rosario; propóngase rezar el Santo Rosario en familia, seguramente en la parroquia se tendrá también esta piedad Mariana, que fortalezca la espiritualidad de la feligresía.

Pero también creo que podemos nosotros corresponderle, recibiendo a su hijo en nuestro corazón, ¿cuantas  veces vamos a la celebración de la Santa Misa? Y nos quedamos sentados y nonos acercamos a recibir aquello que gratis nos da Dios, su propio Cuerpo y su propia Sangre para restaurar nuestra alma.

Por eso cuando una madrina y un padrino se comprometen a acompañar a un niño a un joven, en la recepción de algún Sacramento, vengan en estado de Gracia, para alimentarse de la Comunión, pero después de haberse confesado, no antes.

Ese es un compromiso como padrinos, pero además como parroquia deberán ir pensando en estos próximos 15 años que le van a ofrecer a la Santísima Virgen María, como regalo, por los 500 años de las apariciones en el cerro del Tepeyac.

Que el Señor nos ayude y fortalezca nuestra fe, para que también no solamente recibamos los regalos y las bendiciones de Dios y de María, sino que María para que nos lleve a Dios reciba también nuestra fe, nuestra esperanza y nuestro amor traducido en obras, especialmente que cada vez sean una comunidad más unida, más misionera, más Eucarística,  mas Mariana. Que Así Sea.

Al término de la celebración el Sr. Cura, Pbro. Mario, agradeció a Mons. Faustino, su presencia en medio de la comunidad e invitó a la asamblea a brindarle un caluroso aplauso, el Sr. Obispo a su vez, agradeció las muestras de cariño  recibidas les impartió la bendición, y todos se consagraron a la virgen  María.