𝐒𝐀𝐍𝐓𝐀 𝐌𝐈𝐒𝐀 𝐄𝐍 𝐋𝐀 𝐕𝐈𝐒𝐈𝐓𝐀 𝐏𝐀𝐒𝐓𝐎𝐑𝐀𝐋 – 𝐏𝐀𝐑𝐑𝐎𝐐𝐔𝐈𝐀 𝐃𝐄 𝐍𝐔𝐄𝐒𝐓𝐑𝐀 𝐒𝐄𝐍̃𝐎𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐋𝐔𝐙

Valle Verde, Jalpan de Serra, Qro., 10 de septiembre de 2021.

Mons, Fidencio López Plaza, presidio la Santa Eucaristía, en la comunidad de Valle Verde, Jalpan de Serra, Qro.,  perteneciente a la Parroquia de Nuestra Señora de la Luz, Tancoyol, Jalpan de Serra, Qro., el día 10 de septiembre de 2021.

En el marco de la Visita Pastoral que se esta llevando a cabo por del Decanato de la Sierran Queretana. 

Concelebraron esta Celebración Eucarística,  el Pbro. Luis Alberto Martínez, Párroco, Pbro.  Alonso Montero Decano y Pbro. Damián Almaraz. 

En el Momento de compartir en la Homilía Mons, Fidencio inicio diciendo: «Quién va a un hospital va a curarse y yo quiero hacer esta comparación, con la misa, como cuando uno va al hospital va otras cosas pero principalmente a curarse,  si ustedes se fijan desde el inicio todo lo que pasa en la misa nos ayuda a sanar, por eso es como un hospital.

Iniciamos la misa en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, como signo del amor de Dios y quién está protegido por el amor de Dios está sano, y lo debemos hacer a cada momento porque se envolvernos del amor de Dios y así cada momento de la misa.

El que no perdona está enfermo y es necesario perdonar para que no se haga un cochambre y el «Yo confieso» es, para perdonar, porque el que no perdona está enfermo.

 Después de la palabra con la de Dios, y que me gusto que la tengan en seis escalones, el  primero para tener la Biblia, segundo para leerla,  tercero para entenderla, el cuarto para encarnarla, el quinto para celebrarla y el último para predicarla, es así cómo se hace un discípulo misionero.

Y el centro de la misa es, la consagración del pan y el vino, que representan el sacrificio de todos los que están en misa, cada vez que levantamos la ostia ahí está el sacrificio que tú haces para qué otros tengan vida, y la Eucaristía se convierte en un alimento de vida eterna no para un rato, es un pan que sana Eternamente.

Y luego nos damos la paz, también el que no le da la paz a su hermano, cuidado si después de haber pedido perdón, escuchado la palabra y alimentarse con la Eucaristía, y no le da la pasa su hermano, a su esposo o su esposa, está enfermo.

Y la misa acaba diciendo vayamos en paz, vayan llevando la salud a todos los demás, enamórense de la Eucaristía aquí encontramos la salud del cuerpo, pero sobre todo la paz y la salud del alma. Que Dios así nos lo conceda. Que así sea». Concluyó.

Al terminar la Celebración Mons. Fidencio les dio la bendición, y los allí reunidos le brindaron un aplauso para agradecer su visita como pastor diocesano y su cercanía  para con todos.