TOMA DE POSESIÓN PARR. SAN ISIDRO, COL. PATHÉ.

Av. Pathé esq. Ramón Rodríguez Familiar s/n, Col. Pathé. Querétaro, Qro.

El día 21 de junio del presente año, se llevó a cabo la entrega de la Parroquia  San Isidro, perteneciente al Decanato de Santiago, ubicada en la Colonia Pathé, Querétaro, la celebración Eucarística fue precedida por Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de la Diócesis de Querétaro, en la que se realizó la toma de posesión de la Parroquia por el Pbro.  Martín Becerra  nuevo Párroco, esta celebración fue concelebrada por el Pbro. J. Santos Licea Anguiano CORC y  algunos otros sacerdotes de la Confraternidad de los Operarios del Reino de Cristo, en su homilía el Sr. Obispo les compartió:

“Les saludo a todos ustedes hermanos y  (as) de esta comunidad de San Isidro, en la cual recientemente estuve  y me da mucho gusto poder estar y agradecer en esta ocasión  la tarea pastoral del Padre Santos, que a lo largo de  estos años ha realizado en esta comunidad, pero también darle gracias a Dios porque la  continuidad de la atención sacerdotal, con un  nuevo pastor es  una realidad  con la presencia del Padre Martin Becerra que seguirá realizando esta tarea en comunión,  con nuestra  Diócesis de Querétaro.

Saludo al Padre Amonse  Director Regional  de la Confraternidad de los Operarios del Reino de Cristo, gracias por esta tarea pastoral, que sin duda tiene muchos desafíos especialmente el caminar juntos, en una iglesia particular en la cual el Señor los ha ubicado para realizar  un desafío que es importante en la iglesia,   el desafío de la evangelización, y que es lo que nos toca, porque la iglesia  decía el Papa Pablo VI, existe para  evangelizar.

Hoy la palabra de Dios ilumina esta celebración, cuando en la primera lectura se habla de la semilla, esa semilla que Dios pone en las manos de quien evangeliza nos dice la palabra, y en la medida que esa semilla se siembre los frutos no se hacen esperar, el que más siembra más frutos  recoge dice San Pablo, y el que no, porque hay quien no, no recoge y al final de cuenta la tierra, nuestro pueblo se queda en la aridez.

Uno de los acontecimiento que ha marcado un parte aguas, en nuestra historia   eclesial latinoamericana ha sido el que vivos hace 10 años los Obispos en Aparecida Brasil,  cuanto ha insistido este documento como propuesta de los  Obispos en Latinoamérica, que dijimos que asumíamos la misión permanente, en donde señalábamos que un sacerdote  enamorado de Cristo transforma una parroquia,  sin duda  con la ayuda de Dios, solamente el sacerdote enamorado de Cristo y esto se nota en el rosto físico y en el rostro  de la acción pastoral.

Y esto como fruto de lo que el Evangelio marca,  en contra de aquellos que vivían  de las apariencias, como los fariseos, la oración como esa  relación  con Dios nuestro Padre, no haciéndola para que nos vean,  sino para fortalecer,  sin duda la vida espiritual  de cada uno,  tiene la grande responsabilidad de cultivar  y en el caso de nosotros sacerdotes, esto tienen que ser un gran compromiso,  por eso creo que el sacerdote ante todo,  tiene que ser un hombre de Dios, para mover una parroquia se tienen que empeñar en crecer en la vida espiritual, así con la sencillez  con que nos han formado en el seminario y nos lo han pedido.

 A lo largo  de esta celebración el nuevo Párroco el Padre Martin, recibirá los lugares litúrgicos,   con alguno signos,  uno de ellos   es abrir la puerta de la iglesia como signo de la  autoridad, pero también del deseo de servir para que muchos hermanos entren al templo, pero yo añadiría Padre Martin, para que  después de haber entrado al templo, después de recibir la formación muchos hermanos salgan, las puertas se abren para que salgan, nuestro Plan Diocesano de Pastoral te lo tienes que machetiar  duro,  nos dice que nuestra iglesia es una iglesia de puertas abiertas, y una iglesia en salida, y esto implica sin duda insistir en la formación y formación permanente de nosotros como pastores, y también abrir siempre  espacios para nuestro pueblo.

Creo que ningún pretexto tendría que frenar esta formación para nuestros laicos, el Papa el día de ayer  nos señalaba en la reflexión que dirigió a sus sacerdotes de Roma en la Asamblea  Eclesial que inicio en el recorrido del  sínodo, decía: “nunca es por demás  y nunca hay que dar por perdido a los fieles más alejados” por eso la propuesta del Papa es esa,  una iglesia de puertas abiertas para salir.

El nuevo Párroco, toca simbólicamente las campañas,  para congregar al pueblo y digo simbólicamente porque hoy podemos convocar de muchas maneras, e incluso a través de las redes sociales, a través de los medios  digitales  que tengamos a la mano, pero la campana es una manera de expresar,  la gran responsabilidad que tienes con  esta comunidad  parroquial, que Dios pone en tus manos, con la conciencia de que  las ovejas son de Cristo no  tuyas,  “¿Me amas Pedro?-Si te amo,  apacientas mis ovejas”, no tuyas, por eso son ovejas de Jesús, y ese  es el desafío para un Párroco, yo siempre le he pensado que para ser Párroco,  aunque seguramente muchos quieren ser párrocos, es una gran responsabilidad, delicada responsabilidad, tanto en el plano eclesial, como en el plano legal  jurídico, especialmente en nuestros tiempos  con tantos desafíos, toca las campanas convocando  a tiempo y a destiempo al pueblo para realizar  aquella terea evangelizadora no solamente para sacramentalizar al pueblo sino para evangelizar para llevar la buena noticia.

 Sin duda el  momento en el cual el Padre Martin, recibirá ese lugar tan  importante en una parroquia, como es el confesionario  le compromete a estar  al servicio de ustedes, ósea alguien quiere recibir el Sacramento de la Reconciliación,  aquí está el Párroco y si no los recibe me dicen, para eso está,  si tiene muchas cosas que hacer de acuerdo, pero  tiene esa gran responsabilidad, siempre estar dispuesto para escuchar en confesión a su pueblo, yo creo que es una de las tareas pastorales  que más nos gusta, porque miramos los frutos que espiritualmente provoca la acción de Dios, la gente nos dice Padre absuélvame, no,  el padre lo único que hace es decir  yo te absuelvo en el nombre de Dios, ósea Dios es el que te perdona y el sacerdote viene hacer ese  instrumento de Dios  para recibir su acción misericordiosa.

Al recibir   el lugar litúrgico del Sagrario, allí en  el Padre se postrará en oración, no solamente para cumplir un momento así que tiene que cumplir formalmente, sino como testimonio de hombre de oración que les enseñara como hacer oración, como hombre de Dios  ir sembrando en ustedes el amor, a Cristo en el Eucaristía.

También será conducido a la  pila Bautismal, donde él verterá sobre la cabeza de los niños,  y de los adultos esa gracia del Espíritu Santo, el agua que  imprime ese sello purificador  pero  también  de hijos de Dios a quienes son  bautizados; recibirá esta cede desde donde él  predicará, esta cede es para hablar con la palabra de Dios en la mano y en el corazón, no para  regañar a nadie,  es para  desde aquí estar de frente al pueblo en el nombre de Dios,  como responsable del  caminar espiritual y pastoral de  una comunidad.  

Él también recibirá el altar,  el lugar en torno al cual congregara a los fieles para la celebración  de la Sagrada Eucaristía,  advierto que no solamente hace eso el  sacerdote, sino eso hace el sacerdote para  dar gracias a Dios por  todo lo que hace, es decir en torno al altar tienen que  reunirse los que han sido evangelizados, toda esa tarea de catequesis, toda  esta tarea evangelizadora y toda esa profundización en los misterios de Dios, tenemos que venirlos a celebrar después de haberlos profundizado y sobre todo de haberlos nosotros asimilado, aquí ante el altar, se ponen todos aquellos esfuerzos y  todas aquellas luchas, y todos aquellos frutos también, por eso cada uno de estos lugares litúrgicos son emblemáticos importantes para que  lo largo  de toda tu  vida  sacerdotal espero que sean más de 3 años, Padre Amonse,   para darle continuidad  a una comunidad que necesita una continuidad pastoral que sin duda se refleja en esa entrega  permanente del sacerdote.

Junto con esta tarea, ad-intra en la parroquia,   quiero también pedirte  encarecidamente esa comunión con la Diócesis de Querétaro,  hay dos referentes muy importantes  que hay que tener en cuenta, el Plan Diocesano de Pastoral, porque ninguna  parroquia es una  isla que se cuece aparte, no, sino que está dentro de una iglesia diocesana donde tenemos que caminar juntos, y donde juntos, hemos elaborado un PDP, que marca la ruta con toda la historia, por eso ponemos la historia de la Iglesia de  Querétaro, para darle continuidad a esa historia y ser protagonistas  de la misma en todo este proceso evangelizador y que necesitamos seguir realizando en medio de todos los desafíos,  y que estamos viviendo.

Y ciertamente  un segundo referente es la Agenda Pastoral Diocesana, donde se marcan todos aquellos  momentos que son un ejerció de  comunión con la Diócesis de Querétaro, y tanto consagrados como diocesanos, tienen que estar al tanto de todo aquello que proponemos en la  Diócesis para impulsar la tarea evangelizadora, por eso los eventos para los presbíteros es muy importante que estén  todos los que viven en la Diócesis de Querétaro, y especialmente hoy me dirijo a esta Confraternidad, para vivir en comunión y una comunión que sea fecunda y que incida en sus frutos en un pueblo  que necesita que  seamos creíbles a través del  testimonio.

Que Dios nos ayude, y que la Santísima Virgen María, bendiga la tarea pastoral del Padre Martin, Dios te bendice en este nuevo empeño, tus papas te han bendecido, esta comunidad te bendice, ora y orara por ti, y cuenta con mi pobre oración y espero que tú también todos los días ores por el Obispo,  junto con la comunidad, y seguramente harás una  gran tarea evangelizadora en esta comunidad de San Isidro.

Le pedimos a Dios por el Padre Martin, y por esta Confraternidad que tanto empeño ha puesto en la tarea evangelizadora de nuestra Diócesis de Querétaro. Que así sea”.

Acto seguido el Padre Martin procedió a dar su mensaje diciendo: “Muy Estimado y Excmo. Sr. Faustino Armendáriz, Obispo de Querétaro, que ha tenido el gusto y el tiempo de presidir esta celebración,  al Padre Juan Francisco Gómez Zepeda, Director de la Región de México  de los Operario del Reino de Cristo,  al Padre  Carlos Reynoso Vicario de esta Parroquia y  demás hermanos sacerdotes que nos acompañan en este gran día,   a las Hermanas religiosas que forman parte de esta Parroquia y que colaboran en ella,  a mis papas, a mis familiares y amigos y a mis queridos feligreses de esta Parroquial de San Isidro, que Dios me ha encomendado y de la cual me siento muy contento.

Quiero que en mi los feligreses, el Vicario y las Religiosas, con la gracia de Dios encuentre a un sacerdote cercano,  abierto a sus necesidades, compasivo y misericordioso,  para ello les pido mucha  oración como servidor, y les recuerdo que la Parroquia la conformamos todos los fieles a Cristo, bautizados, por tanto  les pido encarecidamente su apoyo para que trabajemos juntos,  sacerdotes, religiosas y laicos en la extensión del Reino de Dios.

Que Dios bendiga a nuestra Parroquia, con abundantes y santas vocaciones,  a la vida sacerdotal, religiosa y misionera, y apóstoles seglares de buenos y santos  matrimonios, me encomiendo mucho a sus oraciones, bajo el cuidado y patrocinio del Sagrado Corazón de Jesús, de nuestra madre Santísima la Virgen de Guadalupe, del Patriarca San José, y el Santo Cura de Ars. Muchas gracias, y que Dios y María Santísima los bendiga”.

Así fue como concluyo su mensaje el Padre Martin y los allí reunidos le brindaron un fuerte aplauso.