FIESTA PATRONAL Y CONFIRMACIONES TEMPLO DE LA VIRGEN DE SAN JUAN, CHAVARRÍAS.

Chavarrías, Cadereyta, 3 de Febrero de 2018.

El día 03 de febrero de 2018, Mons. Faustino Armendáriz Jiménez,  Celebró la Sagrada Eucaristía en el Templo de la Virgen de San Juan, Patrona de esa comunidad, perteneciente a la Parroquia de San Antonio de Padua,   ubicada en El Doctor, Cadereyta de Montes, Qro., y perteneciente al Decanato de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano, en el marco de su Fiesta Patronal, en la cual  15, niños y niñas, recibieron el Sacramento de la Confirmación, con el que se les otorgó en Don del Espirita Santo,  de manos de Mons. Faustino,  concelebraron esta Santa Misa el Pbro. Rosendo Zavala Herrera, Párroco San Antonio de Padua,  y el Diacono José Luis López Gutiérrez,  el Sr. Obispo en su  homilía les compartió diciendo:

“Saludo a todos los miembros de esa comunidad de Chavarría, hoy celebramos con alegría la Santísima Virgen María,  patrona de este lugar Nuestra Señora de San Juan de los Lagos, que tradicionalmente se celebra el día de la Candelaria, es decir  un día luminoso y nuestra celebración tiene referencia en la presentación del Niño Jesús, y celebramos la luz de aquel anciano que estaba en el templo Simeón y aquella anciana Ana,  por esto es importante expresar el júbilo de alguien que se ha encontrado con Jesús y que lo pone como la luz de las Naciones,   es alguien que me ilumina  a cada uno de nosotros y que es luz para cada uno de nosotros en momentos de oscuridad, por eso hoy también al encontrarnos también  nosotros aquí la invitación y en donde nos alegremos en Cristo,  aquel que puede ayudarnos a guiar nuestra vida.

La Santísima Virgen y San José,  cumplen con la ley que prescribía de llevar después de 40 días de nacido al niño para  presentarlo al templo,  ¿para qué?  -para consagrarlo a Dios,  no solamente por cumplir una ley, sino porque los niños son de Dios, esa es la importancia de ser presentados a Dios y de ahí la costumbre de llevarlos a los tres años al templo,  la fe de los papás que desde pequeños quieran compartir la fe y los llevan a bautizar es como la presentación del Niño Jesús ante Dios, y decirle este niño Jesús es tuyo,  que sea ungido de tal manera que ahora pertenezca a la gran familia de los hijos de Dios.

Estos niños van creciendo y a lo largo del tiempo,  de la edad hay un momento en el cual se ratifica su consagración,  se ratifica esa fe del niño, el niño va creciendo como Jesús en edad,  pero también en conocimiento de Dios y amándole así  obedeciendo  sus mandamientos, y ¿de quién depende? -de los papás,  hoy estos niños que van a ser confirmados,  vienen precisamente a eso,  a confirmar esa fe que sus papás y padrinos expresaron  cuando fueron bautizados, ahora lo van a hacer ellos diciendo,  sí creo,  si renuncio al mail,  sí creo en la iglesia,  sí creo en la resurrección de los muertos,  esta expresión de fe es importante sí,  pero también es importante que ustedes papas le sigan ayudando a estos niños a crecer en el amor a Dios y en el respeto a Dios.

Fíjense como las personas que traen sombrero o gorra, se la quitan porque el templo   es  un lugar sagrado  y consagrado a Dios,  un lugar que tenemos que respetar y ayudar a los niños  a crecer en el respeto al templo porque es una manifestación externa y es un signo de que respetamos el lugar como un lugar sagrado,  hay un momento en la santa misa en la cual también reconocemos que ese milagro de Dios, cuando convierte un trozo de pan en el cuerpo de Cristo es un momento sagrado y por eso en este momento ¿Cómo debemos estar nosotros? hincados,  de rodillas eso enseñárselo a sus hijos,  tenemos que estar de rodillas porque nos enfrentamos ante este gran milagro donde Dios se hace presente vivo aquí en el altar, en el Santísimo Sacramento,  el  templo es un lugar de respeto donde también tenemos que guardar silencio no es para venir a platicar,  si no es para venir a hablar con Dios.

Por eso tenemos que respetar, y desde el momento en que la Santa Misa deciden hacerlas en el atrio se convierte en un templo y por eso en el momento de la Consagración,  todos salvo aquellos enfermos que no puedan arrodillarse,  todos tendríamos que estar de rodillas postrados y enseñarles a los pequeño  así como  José y María enseñaron  a Jesús todo lo prescrito por la ley a su hijo,  así los papás no solamente para que no se pierda una tradición,  sino para que se fortalezca la fe.  Aprendan ustedes y enséñenles  a sus hijos y hagan de esto un hábito, sin duda Dios ama a los pequeños y siempre los bendice,  Jesús da ejemplo de que desde niño es llevado por José al templo, para ser consagrado a su Padre Dios

Y en esta gran fiesta de esta comunidad , que sea la gran fiesta de la luz,  que la Santísima Virgen María interceda por nosotros y nos lleve al encuentro con Jesús y que esta manifestación de Jesús como luz ilumine también  a esta   a esta comunidad  de Chavarías y a esta comunidad de San Antonio,  para que vaya teniendo como referencia a Jesús,  cuando vayamos a tomar una decisión,  hay que pensar que me dice Jesús,  cuando voy a dar un paso importante,   tengo que pensar que le gustaría a Jesús.  Pues que el Señor nos ayude y que tratemos de agradar a la Santísima Virgen María,  y hay muchas expresiones y signos con las que agradamos a Dios,  ahorita comentábamos algunos el respeto,  poniéndonos de rodillas,  poniéndonos  de pie, escuchando la palabra de Dios y estar muy atentos,  cuando comulgamos no ir platicando sino más bien postrarnos unos momentos de rodillas,  o un momento sentado para darle gracias a Dios por este gran regalo de la Eucaristía,  cuando estos niños se confirmen van a decir,  Amén y luego se sientan y en silencio le darán gracias a Dios por el gran regalo,  pues sigamos haciendo muchos signos de amor a Dios.

Para quienes vienen desde Ezequiel Montes no es fácil recorrer esas distancias, pero es un signo de amor a la Virgen y de amor a Dios,  cada uno de nosotros desde nuestro interior tenemos algo porque dar gracias, ellos ofrecen su sacrificio y cada uno de nosotros podemos también desde nuestro interior manifestar nuestra adoración y nuestro amor. Que así sea”. 

Al terminar el Párroco le dio las gracias al Sr. Obispo por su visita a esa comunidad y los allí reunidos le brindaron un fuerte aplauso.