CONFIRMACIONES Y FIESTA PATRONAL PÁRR. DE SAN ISIDRO LABRADOR, COL. PATHE, QRO.

Manuel Rodríguez Familiar No. 23, Colonia Pathé, Querétaro, 15 de mayo de 2017.

Confirmaciones en la Fiesta Patronal de San Isidro Labrador, en la Parroquia del mismo nombre, ubicada en la Colonia Pathé, Querétaro, que se llevó a cabo el día 15 de mayo del presente,  la  Santa Eucaristía fue precedida por Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, y quien también impartió el Sacramento de la Confirmación a 97 niños y jóvenes, que fueron preparados debidamente a lo largo de un año, y concelebrada por el Pbro. Carlos Alberto Reynoso, Pbro. Santos Licea  Anguiano Párroco y Padre Filiberto Ambrone, de los Operarios del Reino de Cristo.

El Sr. Cura, le dio la bienvenida al Sr. Obispo con las siguientes palabras: Padre nuestra comunidad Parroquial experimenta una bendición del cielo al contar con su presencia, como Obispo de nuestra Diócesis y agradecemos el que les dé  el Sacramento de la Confirmación, a estos niños,  y niñas de nuestra Parroquia, nos da una gran alegría y por ello le damos este aplauso de bienvenida.

El Señor Obispo des compartió al iniciar: “Invocaremos el Espíritu Santo sobre quienes van a ser confirmados,  pero también pediremos la intercesión de San Isidro,  un hombre  con un corazón sencillo y agradecido a Dios”. Y en su  Homilía les dijo:

“Hermanos de esta comunidad de San Isidro Labrador, hermanos sacerdotes, Padre Santos y saludos a  todos a mis hermanas consagradas y a todos  los y las  catequistas, que con tanta generosidad   realizan la tarea de formar a estos niños y jóvenes,  en nuestras comunidades y que de manera incondicional,  se consagran al Señor, gracias por esta tarea, gracias porque son misioneras de la palabra de Dios y en la catequesis.

Hoy celebramos en la iglesia universal,  a San Isidro Labrador, que es un santo admirable, un santo muy pobre y no porque haya hecho muchas penitencias y haya asumido así la pobreza,  como las hermanas religiosas o los religiosos que voluntariamente son pobres. 

Él era pobre de familia,  sus papas eran muy pobres e incluso  ni tuvo la oportunidad de ir a la escuela,  y trabajaban con un patrón labrando la tierra, y le hicieron la vida imposible, porque desde  niño y joven le gustaba mucho ir al templo a rezar, y postrarse ante el Santísimo,  que bonito ver a un niño o joven ante el Santísimo, y por qué se la pasaba bien  y estaba  a gusto con Jesús y platicaba con Jesús,  porque era amigo de Jesús.

¿Quién le enseña a un niño a rezar? – los papas, le enseñaron el temor   de Dios, no tenerle miedo a Dios, sino a adorar y venerar a  Dios, temor reverencial, de tal manera  que pudiese estar delante de Jesús  y se le pasaba el tiempo,  y llegaba después de la  hora convenida a tomar una yunta, pero también se cuenta  que mientras el oraba, la yunta andaba  recorriendo los surcos, y con los bueyes iba un ángel, y le atribuyen ese milagro.

Si te encomiendas  a Dios y si te dejas ayudar por Dios, ¿Qué pasa?  Dios te ayuda, esa es la realidad y  esa es la enseñanza y así creció San Isidro Labrador,  y cuando fue joven se casó y también su esposa fue santa, y tuvo un hijo, y les agradecemos a las catequistas porque junto con los papas,  que también conocen esto por ser de esta Parroquia, los niños tienen que ir aprendiendo todas estas  enseñanzas que son lecciones para ellos,  porque San Isidro fue niño como ustedes, pero un niño enamorados de Dios.

Un niño que amaba a Dios y que sabía  que Jesús estaba en su Sagrario,  en la Hostia Consagrada, y si le hablamos nos escucha, hoy por ejemplo podemos darle gracias por que nos regalo el Don del Espíritu Santo,  darle gracias por sus papas, y unos hermanos, darle gracias  por el Don de la Fe,  como se lo dio a San Isidro Labrador.

Y murió a los 60 años, y se fue al cielo como todos los que se portan bien, y lógicamente se pedía intercesión  para pedirle a Dios favores, y  empezó a hacer milagros y esa es la razón por la cual fue  canonizado, junto con grandes santos,  fue canonizado con San Ignacio de Loyola, con Santa Teresa de Jesús, con San Francisco Javier, grandes santos, ósea  en San Isidro tenemos un gran santo.

¿Cuál fue la clave para ser santo? -Estar unido a Jesús, y unido como el sarmiento, del que nos habla hoy el Evangelio,  así como la planta de la uva los brazos están unidos al tronco, y entonces cuando nosotros estamos unidos a Jesús,  no podemos secarnos, el que estas separado de Jesús se seca, y se muere, y se quema.

San Isidro, estaba unido a Jesús, y por eso  se fue alimentando cada día más de Jesús, de tal manera que sentía la necesidad  de estar con Jesús, y de él tenemos que aprender a visitar el Sagrario, a la hora que sea, todos  también los padres y los ministros y las monjitas, visitar más el sagrario a enamorarnos de ese Jesús.

No de ese Jesús que está  en mi imaginación,  sino aquel Jesús que nosotros leemos en los evangelios, ese Jesús que nos perdona, que nos ama, que nos purifica y que nos  absuelve cada vez que nos acercamos al sacerdote pidiéndole  perdona Dios por nuestros pecados  ese Jesús que no quiere que vivamos divididos entre nosotros,  ese Jesús que quiere que seamos santos.

 Desde niño,    ser santos como lo fue San Isidro, y aquí está la tarea de ustedes,  papas y padrinos que acompañan a estos niños y jóvenes en estos días donde hay tanta propuesta,  para desviarse  del camino, ¿qué hacer por nuestros niños?, ¿qué hacer  por nuestros jóvenes, que hacer  por nuestros adolescente?, ¿lamentarnos porque que ya no son como antes?, -se tiene que buscar  el único camino que existe, acercarnos a Dios.

¿Y cómo puedes acercarlos a Dios?  Amándolo tú, y es que ellos ven el ejemplo que les estas dando, por eso los papas  de San Isidro nos enseñan que el único camino para tener hijos santos, es ser papas santos y también ustedes padrinos,  porque si los escogieron a ustedes es porque algo vieron en ustedes, probamente no mucho pero algo, o quizá vieron a los mejores padrinos que pudieron encontrar, para acompañarlos en su caminar hacia la santidad a sus hijos.

Hoy necesitamos muchos Isidros, y el también recibió los sacramentos como ustedes hoy los van a recibir, recibió al Espíritu Santo y eso fortaleció su decisión, hoy le pedimos a Dios y a la Santísima Virgen María y a la intercesión de San Isidro, que nos ayude a recibir este gran regalo de Dios, ustedes que con sus papas se acerquen más a Dios.

Los sacramentos son un regalo de Dios, no esperes a que te estés muriendo para que te den la Unción de enfermos, a lo largo de nuestra vida hay muchos sacramentos,  que podemos recibir pero especialmente la Confesión y la Eucaristía, que el Señor nos ayude y bendiga especialmente a quienes hoy van a ser confirmados. Que Así  Sea.”

Al término de la celebración, el  Sr. Cura, les agradeció a las catequistas, su trabajo discreto pero fecundo, y que Dios les recompensará todo lo que hacen por estos niños y jóvenes e invito a la comunidad a  brindarles un fuerte aplauso.

De igual manera agradeció nuevamente la presencia del Sr. Obispo en esta comunidad, y la asamblea le brindo un fuerte aplauso como muestra de cariño y agradecimiento a Mons. Faustino.