CONFIRMACIONES PARR. NTRA. SRA. DEL PERPETUO SOCORRO.

Col. Carretas, Querétaro, Qro.,  a 26 de mayo de 2018.

El día 26 de mayo de 2018, Mons. Faustino Armendáriz Jiménez, Obispo de la Diócesis de Querétaro,  presidió la Santa Misa en  la Parr. Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, Col. Carretas, en la cual 50 niños y jóvenes recibieron por medio de la imposición de manos, el Sacramento de la Confirmación, 5 niños recibieron por Primera vez la Sagrada Comunión, y se instituyeron a 2 hermanos nuestros,  como Ministros Extraordinarios de la Comunión,  dentro de la homilía Mons., les invito a invocar al Espíritu Santo para afrontar tantos retos que se nos presentan en nuestro mundo,  porque él es el único que nos da la fuerza para lograrlo, invito a los Papas y Padrinos a seguir instruyendo a estos niños y jóvenes sobre todo con su testimonio y en el seno de su propio hogar escuela doméstica; y a los hermanos que fueron instituidos como MEC., les invito a tener presente la gran responsabilidad que tienen al  ir a los hogares y catequizar,  proclamar la Palabra de Dios,  y entregar la Sagrada Comunión a los enfermos, y los exhorto a llevar a cabo con gran responsabilidad esta misión.  

Los que se preparan para ser confirmados,  fueron presentados por el Pbro. Guillermo Landeros Ayala, Párroco de esta comunidad, y quien dio testimonio de su formación adecuada a su edad y durante el tiempo adecuado para ser conscientes del gran regalo que recibirán,  concelebro el Pbro. Juan Martín Vega González, Vicario de la misma y algunos otros sacerdotes que acompañan al Sr. Obispo. Quien en su homilía completa les compartió diciendo:

“Muy queridos hermanos,  al proclamar todos “Ven Espíritu Santo a renovar la tierra”,  en el salmo responsorial le pedimos a Dios un milagro,  el milagro que Dios está dispuesto hacer, renovar nuestros corazones,  renovar la tierra renovar el mundo,  renovar la salvación;  creo que solamente aquel que confía en el Espíritu Santo y su acción poderosa e iluminadora puede hacer algo en la renovación de lo que se pretende renovar,  quizás a veces se nos dice que hay que renovarnos,  que hay que renovar las estructuras de nuestro pueblo, las estructuras de nuestra nación, pero con ayuda de quien solamente porque con el ser humano eso será imposible,  la renovación personal y nacional una renovación de la faz de la tierra con tanto retos que hay en nuestro mundo solamente,  lo podemos hacer con aquel que nos creó y que creó al ser humano y que creó al mundo, lo puede hacer Dios, con la fuerza y el poder del Espíritu Santo y esto es un milagro. 

Hoy invocamos al  Espíritu Santo y le decimos ven Espíritu Santo,  a la vida y al corazón de estos niños y jóvenes,  el mismo Espíritu Santo se hizo presente en la persona de Jesús,  la consecuencia de esa presencia fue evangelizar a los pobres,  fue liberar a los cautivos,  fue realizar un proceso de transformación que el mismo Jesús inició con su presencia entre nosotros y hoy quiere que nosotros cómo discípulos misioneros,  cómo lo hacen ustedes,  como en este momento lo están haciendo muchos misioneros de esta comunidad,  aquí en la parroquia que andan visitando casa por casa,  hablando de Dios,  hablando de esta presencia real que Dios tiene entre nosotros, de tal manera que con un misionero a la puerta de sus casas la Palabra de Dios pueda penetrar en el corazón de quienes la conforman y puede penetrar en los hogares.

Y eso es el principio transformador de una sociedad, de una familia; hoy lo invocamos para estos niños que van a ser confirmado y que piden del Sacramento de la Confirmación,  en cada Sacramento lo sabemos nosotros recibimos una infinidad de beneficios  divinos,  de tal manera que cuando recibimos esas gracias,  esas bendiciones,  se hace posible que quien lo recibe realiza la misión,  porque esta es una responsabilidad que le toca hacer,  un matrimonio que recibe la bendición de Dios en el Sacramento del Matrimonio recibe todos los auxilios de Dios para vivir el amor,  para vivir la fidelidad,  para procrear una familia,  porque al fin de cuentas la obra es de Dios;  a nosotros creo que nos queda la disponibilidad para hacer lo que Dios quiere en nuestras vidas.

Hoy pues le invoquemos lo con fe,  sobre estos niños sabiendo que si nosotros decimos ¡Ven Espíritu Santo!,  el poder de Dios se hace efectivo entre nosotros,  estos niños y jóvenes han recibido una catequesis amplia a lo largo de un tiempo determinado por nuestra Diócesis,  de tal manera que hace posible que comprendan con más claridad que es lo que están recibiendo y esto que les provoque ilusión  y alegría para continuar adelante,  de tal manera que en su momento después de haber recibido con más fuerza el Espíritu Santo reciban la presencia de Jesús vivo en la Eucaristía,  pero que se sigan formando con la ayuda de sus catequistas,  pero especialmente en lo que llamamos la iglesia doméstica que es la iglesia en casa donde los catequistas principales son ustedes papas y ahora estarán auxiliados por quienes lo acompañan como padrinos y madrinas,  qué les tendrás que enseñar más allá que con las palabras con su testimonio,  con su convicción por eso desde hoy la presencia del padrino es importante en la vida de estos niños,  porque hay una relación espiritual que hace posible que los niños también sean bendecidos por el testimonio de ustedes padrinos.

Pues que el Señor los ayude,  y que este momento sea muy importante para la vida en la historia de estos pequeños y de estos jóvenes hoy también instituiremos a dos Ministros Extraordinarios de la Comunión,  sin duda son grandes corresponsables de la vida de una parroquia,  porque no solamente distribuyen la sagrada comunión,  sino también tienen la gran responsabilidad de ir a los hogares y catequizar,  proclamar la Palabra de Dios,  entregar la Sagrada Comunión a los enfermos,  a ellos los exhortamos a que hagan con gran responsabilidad está misión;  una tarea misionera importante en el seno de la iglesia en donde se refleja la apertura para que la misión también tenga una responsabilidad trascendente en la vida de una parroquia.

Que cada vez está parroquia sea una parroquia evangelizada través de la catequesis y a través de todos los procesos,  que la luz del Plan Pastoral de nuestra Diócesis, nos  oriente  para ir caminando en comunión con toda la Diócesis de Querétaro. Pedimos la intercesión de la Santísima Virgen María para que ella también nos proteja y nos ayude a realizar la voluntad de su hijo Jesucristo,  en nuestro hogar,  en nuestra vida personal,  en nuestra sociedad y que el Espíritu Santo sea realmente un movimiento de renovación de nuestras familias y de nuestra sociedad. Que así sea”.

Al término de la celebración Mons. Faustino les dio la bendición a todos los allí reunidos y ellos como muestra de cariño le brindaron un fuerte aplauso.